El sábado 11 de septiembre de 2004 salió a la calle por primera vez El Megáfono, un semanario de 16 páginas  que se distribuiría en forma gratuita en la Ciudad de Río Cuarto, Córdoba, cubriendo un circuito diferente a los medios comerciales y comercializados. En aquel entonces, eran tres los integrantes de este grupo pre cooperativo, que con los años se transformarían en la Cooperativa de Trabajo Bases Ltda.
La edición de El Megáfono nació persiguiendo la idea de realizar un producto en los ámbitos cotidianos de los grandes segmentos de la población para quienes el mercado tenía destinado sólo el rol de consumidores pasivos tanto de bienes materiales  como culturales.
Los pioneros de este proyecto constituían un grupo de amigos que trabajaban a pulmón, con la esperanza de transformar la forma de hacer comunicación y con la clara intención de constituirse en una Cooperativa de Trabajo. Transformar la comunicación haciendo algo que valiera la pena, desafiar el sometimiento cultural contenido en el discurso hegemónico del mensaje mediático, hacer converger en el trabajo la profesión y la visión política: una comunicación de carácter social que no se rigiera por las lógicas del mercado. Constituirse como cooperativa persiguiendo un ideal político de autogestión, de valores y principios guías en un accionar consecuente con la construcción de una sociedad y un mundo mejor.
Comenzaron funcionando adentro de un garaje prestado, con  dos computadoras personales, una cámara fotográfica, un escritorio y una tabla con caballetes, medio día de cada uno ocupado en otra actividad  y el resto de las horas diarias puestas en este proyecto.
Entre el 2004 y el 2005, todos los jueves llevaban a una imprenta privada las 16 páginas para imprimir el semanario. A las 12 de la noche se las devolvían ya impresas y entre los tres compañeros las compaginaban y doblaban durante la madrugada para que a la mañana siguiente, a las 8 AM los repartidores ocasionales pudieran retirar los ejemplares y entregarlos en los 300 puntos de distribución.
Según lo relatan sus propios integrantes en  el libro “Periodismo con Valores”, el cual describe  la historia de las cooperativas que componen la Federación Asociativa de Diarios y Comunicadores de la República Argentina (FADICRA), aquella primera experiencia como editores les dejó como saldo el saber que  el proyecto era posible y, como deber, la necesidad de incorporar en la estructura el área de impresión.
Durante esta primera etapa, los compañeros de Bases contaron con algunos colaboradores que compartiendo los mismos ideales se sumaron a este proyecto y se encargaron de la redacción de las columnas de deportes y culturales. Hoy, uno de esos jóvenes aun acompaña a los 3 pioneros en la cooperativa y se ha transformado en el editor del semanario.
A pesar de que en el 2005 el semanario dejó de salir a la calle, el proyecto no se terminó. Los compañeros de Bases tenían la certeza de que se trataba sólo de una transición. El espacio cooperativo seguía funcionando con trabajos en comunicación gráfica para terceros, fundamentalmente sindicatos: revistas, boletines, folletos. Su idea era poder generar un ingreso que les permitiera capitalizarlo en una impresora propia.
En ese proceso, dejaron de ser 3  y pasaron a ser un grupo de 10 personas que en abril de 2009, a partir de la entrega de la matrícula del INAES, quedaron formalmente constituidos como Cooperativa de Trabajo Bases Ltda.
En aquel momento la Cooperativa consiguió un espacio físico donde funcionar y alquilaron un espacio  bajo una tribuna de un estadio de futbol. Las condiciones edilicias del espacio estaban deterioradas, pero la cooperativa asumió la  responsabilidad de hacer uso del espacio y reacondicionarlo mensualmente como forma de pago. Ese bajo tribuna se transformó de a poquito en una oficina, que sería la sede de Bases hasta julio de 2013.
El 13 de marzo de 2009 El Megáfono volvió a las calles con una tirada de 3000 ejemplares repartidos en 350 puntos de distribución. A través de su reaparición en las calles, los compañeros cooperativistas apelaron a “regenerar el tejido social, a fortalecer redes de producción y circulación de información de ideas, de proyectos, de aspiraciones, de sueños y de organización social sobre todo”. El Financiamiento del semanario se realiza a través de la generación de otros trabajos dentro del taller gráfico. La cooperativa ocupa un rol político para sus integrantes, El Megáfono es el sostenimiento de ese proyecto de transformación comunicacional, social y cultural.
En estos 4 años, Bases ha consolidado tres áreas de productos que son llevadas a cabo por sus 15 asociados: gráfica, textil y web.
Un paso muy importante para el fortalecimiento de  la cooperativa fue haber firmado un convenio de complementariedad en el año 2009 con la Cooperativa de Trabajo Comercio y Justicia de la ciudad de Córdoba, a través del cual está última comenzó a imprimir El Megáfono en su imprenta y Bases a repartir su periódico en Río Cuarto. Además, este fue el puntapié inicial para conocer a muchas de las cooperativas con luego se  transformarían en los fundadores de FADICCRA.
En el año 2010, reciben dos impresoras, una blanco y negro y una a color, las cuales les permitieron concretar el proyecto de imprimir El Megáfono en sus propias máquinas, como asa también ampliar el rango de impresiones para otras organizaciones. Además en el año 2011 continuaron con este crecimiento adquiriendo una guillotina propia, con lo cual la realización del semanario pudo realizarse por completo en la cooperativa.
Apuntalando el proyecto comunicacional de integración y participación social, lanzaron dos campañas culturales. Cultura popular en la calle,  produciendo remeras con referentes de la cultura popular y el pensamiento nacional y latinoamericano y; el Megáfono en las Aulas, con la cual se involucran docentes y alumnos de las aulas de las escuelas públicas para realizar las efemérides que se publican en la contratapa del semanario.
“El megáfono es un medio gratuito que circula por los barrio, por lo gremios y se anida en la casa de los trabajadores. Es gratuito y no se sostiene por pauta publicitaria directa. No cabe en este proyecto destinar tiempo y especializar trabajadores para la producción publicitaria, para la generación de intercambios de mercancías de grandes anunciantes para quienes el cuerpo de lectores serían, a lo sumo, un conjunto de consumidores cautivos”, manifiestan en el libro Periodismo Con Valores  sus propios trabajadores.
Desde FECOOTRA, le damos la bienvenida a la Cooperativa de Trabajo Bases, recientemente asociada a nuestra federación felicitándolos por el trabajo realizado, por el compromiso y la convicción de que a partir de la integración se construye cotidianamente un mundo mejor.

Área de Comunicación.
FECOOTRA